Lave
los calabacines y córtelos en tajadas finas. En una
cacerola de fondo pesado derrita la mantequilla,
saltee la cebolla y el ajo, al trasparentar añada el
maíz dulce, bien escurrido, añada la leche y la
fécula de maíz disuelta en ella, remueva
constantemente hasta que espese, salpimiente al
gusto y retire del fuego. Aparte en un molde
refractario enmantequillado coloque un poco de la
mezcla para cubrir el fondo, coloque calabacines
tajados y luego queso, repita hasta terminar con
queso y lleve al horno por unos 45 minutos a 350º
aproximadamente